Todos nos hemos encontrado alguna vez con la necesidad de compartir una contraseña.
Pero la mayoría de las veces no pensamos realmente en cómo lo compartimos. Y si lo estamos haciendo de forma segura.
Si se pregunta cómo compartir una contraseña de forma segura, ¡esta guía es para usted! Juntos veremos 4 métodos habituales para compartir una contraseña, ya sea en casa o en el trabajo. ¡Empecemos!
Por cierto, consulta esta guía si buscas consejos para generar las contraseñas más seguras.
Los riesgos de compartir contraseñas sin seguridad
Todos necesitamos compartir contraseñas. Ya sea para compartir una cuenta de streaming, dar acceso a la Wi-Fi de casa o compartir credenciales con compañeros de trabajo, se ha convertido en algo que no nos pensamos dos veces.
Pero aunque seamos quisquillosos sobre con quién compartimos las contraseñas, no lo somos tanto sobre el cómo.
¿Quién de los presentes ha escrito ya una contraseña en una nota Post-it para un colega? ¿O simplemente ha hecho una foto de la contraseña del WiFi y la ha enviado por Messenger?
Aunque estas situaciones no parezcan un gran problema, compartir contraseñas sin las medidas de seguridad adecuadas puede exponer los datos personales y empresariales a riesgos considerables.
Así que antes de sumergirnos en nuestros 4 métodos favoritos para compartir contraseñas de forma segura, vamos a ver cómo NO compartir una contraseña.
¡Deje de utilizar correos electrónicos o mensajes de texto sin cifrar!
Uno de los métodos más frecuentes para compartir contraseñas de forma insegura es el correo electrónico o los mensajes de texto. Como estas plataformas no están cifradas por defecto, pueden ser interceptadas fácilmente por hackers o actores malintencionados.
Si una cuenta de correo electrónico se ve comprometida, por ejemplo, todas las contraseñas que se han compartido a través de ella se vuelven vulnerables, dejando en peligro cuentas críticas.
Además, compartir contraseñas por SMS es inseguro, sobre todo teniendo en cuenta el aumento de los ataques de intercambio de SIM, en los que los hackers pueden secuestrar números de teléfono y acceder a información sensible.
Compartir contraseñas de forma insegura en el lugar de trabajo puede tener consecuencias aún más graves. Las contraseñas compartidas de forma inadecuada pueden conducir directamente a vulneraciones de datos, pérdida de propiedad intelectual o incluso daños a la reputación.
Un ejemplo de ello es el hackeo de Sony Pictures de 2014. Durante este incidente, un grupo de hackers accedió a datos delicados, incluidos correos electrónicos internos, registros de empleados y listas de contraseñas.
Muchas de estas contraseñas se almacenaban en texto plano en hojas de cálculo y se compartían abiertamente por correo electrónico entre empleados y ejecutivos. Hubo numerosos casos de correos electrónicos que contenían credenciales de acceso y contraseñas delicadas para cuentas clave de la empresa, almacenadas sin cifrar. Esto permitió a los hackers obtener un acceso más profundo a los sistemas internos, amplificando el daño causado por la filtración.
Incluso métodos aparentemente más inofensivos, como anotar contraseñas o almacenarlas en apps de notas sin protección, introducen riesgos de seguridad. Las notas físicas pueden perderse fácilmente, ser robadas o vistas por personas no autorizadas, mientras que las aplicaciones no seguras para tomar notas carecen del cifrado necesario para proteger los datos sensibles.
También existe el mal hábito de reutilizar las contraseñas, pero lo analizamos en nuestra guía sobre los 5 principales malos hábitos con las contraseñas.
Método 1: Utilizar un gestor de contraseñas
Un gestor de contraseñas es una de las formas más fiables de compartir contraseñas de forma segura. Estas aplicaciones encriptan su bóveda de contraseñas, permitiéndole enviar credenciales de acceso sin exponerlas en texto sin formato.
Por ejemplo, si comparte su inicio de sesión de Netflix con un familiar, lo haría:
- Primero, añada la contraseña a su bóveda.
- Utiliza la función de compartir del gestor de contraseñas para enviarla de forma segura.
- El destinatario recibe una notificación y obtiene acceso (a veces sin siquiera ver la contraseña).
- Más adelante, puede revocar el acceso a esa contraseña.
Existen múltiples gestores de contraseñas, cada uno con sus pros y sus contras. La primera decisión que tendrá que tomar es si utilizar un tercero de confianza (como Bitwarden o 1Password) o una solución autoalojada como Keepass. Aparte de eso, le recomendamos que investigue por su cuenta antes de elegir un gestor de contraseñas y migrar todas sus contraseñas.
Método 2: Cómo compartir una contraseña utilizando aplicaciones de mensajería segura
¿No quiere pasar por el engorroso proceso de migrar a un gestor de contraseñas? ¡No hay problema!
Utilizar una aplicación de mensajería encriptada como Signal o Session es la mejor alternativa.
Estas aplicaciones ofrecen cifrado de extremo a extremo, garantizando que sólo usted y el destinatario podáis ver los mensajes. Sin embargo, la encriptación es abstracta, lo que significa que utilizar Signal es tan fácil como enviar un mensaje de texto. También puede enviar una contraseña a través de un mensaje que desaparece, que se autoelimina después de ser visto.
Así, aunque su teléfono o el del destinatario se vean comprometidos, la contraseña no será visible. El único requisito es que tanto el remitente como el destinatario utilicen la misma aplicación.
Alternativamente, puede utilizar un servicio de correo electrónico seguro como Mailfence.
Con Mailfence, puede enviar correos encriptados, ¡incluso si el receptor no utiliza Mailfence! Puede utilizar tanto la encriptación simétrica como la asimétrica. Para saber más sobre la diferencia entre ambos, consulte esta guía.
Método 3: Cómo compartir una contraseña mediante AirDrop (dispositivos Apple)
Para los usuarios de Apple, AirDrop es una forma muy popular de compartir fotos.
Sin embargo, ¡también puede utilizar AirDrop para compartir contraseñas!
AirDrop utiliza Bluetooth para crear una conexión directa y cifrada, lo que le permite compartir credenciales de forma segura sin que entren en contacto con Internet. Por ejemplo, si quiere compartir el inicio de sesión de una aplicación con un colega cercano, puede abrir la contraseña en los ajustes de su iPhone y utilizar AirDrop para enviarla. Esto garantiza que la contraseña permanezca segura durante la transferencia.
El único inconveniente de este método es que ambas partes necesitan un iPhone.
Método 4: Utilizar códigos QR (cuando estén disponibles)
Por último, una forma fácil de compartir contraseñas entre plataformas es generando códigos QR.
En los dispositivos Android, puede crear un código QR desde la configuración Wi-Fi. De esta forma, puede compartir su contraseña WiFi sin revelar el texto real.
El destinatario simplemente escanea el código con su cámara y se conecta a la red sin teclear nada. Sin embargo, este método está limitado a compartir contraseñas WiFi. Es posible crear códigos QR personalizados mediante aplicaciones específicas para compartir cualquier contraseña, pero no lo recomendamos.
Algunos consejos adicionales
Lo hemos dicho antes, pero lo diremos de nuevo: ¡active siempre la 2FA en tus cuentas!
Activar la autenticación de dos factores (2FA) añade una capa adicional de protección al requerir una segunda forma de verificación.
Si comparte sus contraseñas, no olvide cambiarlas regularmente. Esto reducirá aún más el riesgo de acceso no autorizado.
Reflexiones finales sobre cómo compartir una contraseña de forma segura
Hasta aquí esta guía sobre cómo compartir contraseñas de forma segura. Esperamos que le haya resultado útil y que pueda aplicar estos conocimientos para proteger sus contraseñas en el futuro.
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¿Tiene alguna pregunta? No dude en consultar nuestra Base de conocimientos, o escríbanos a support@mailfence.com.
